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Los Mitos del Diseño Gráfico

Desmintiendo los MITOS del Diseño Gráfico

Natalia Arnez Gil


Desde que elegí la carrera de diseño gráfico, he enfrentado dificultades al tratar de comunicar que es lo que realmente implica esta disciplina. Muchas veces, al mencionar mi elección de este estudio, notaba la decepción en los ojos de las personas, quienes terminaban diciendo que solo tenía que hacer simples "dibujitos". Para ellos, el diseño gráfico parecía solo una forma "profesional" de decir que estudiaba artes visuales. Esos comentarios,  momentos de silencios incómodos y las miradas decepcionadas me llevaron a dudar  muchas veces de mi elección, desencadenando crisis existenciales y mucha tristeza. 

Sin embargo, con el tiempo, llegué a comprender que esas personas no conocían realmente la profundidad y la diversidad de la disciplina del diseño gráfico. ¿Qué sabían ellos de los desafíos y las pasiones que me impulsan? Al darme cuenta de que sus comentarios eran simplemente expresiones de desconocimiento, decidí confiar en mi elección y superar sus prejuicios. ¿Y qué creen? Al final yo gané. 

En un mundo cada vez más visual y digital, el diseño ha emergido como una fuerza impulsora en casi todos los aspectos de nuestras vidas. A pesar de su omnipresencia, los mitos persisten en torno a la importancia del diseño en el ámbito laboral. Estas percepciones equivocadas han llevado a subestimar la verdadera relevancia del diseño en el mundo profesional. Por ende, en este artículo, desafiaremos algunas nociones preconcebidas  (mitos) que tanto miedo nos causaron y revelaremos el verdadero poder del diseño para transformar ideas en realidades cautivadoras. 


  • Mito 1: "El diseño se reduce a simples dibujos y estética."

El mito de que el diseño se reduce a simples dibujos y estética es erróneo, ya que el diseño es una disciplina multifacética que implica mucho más que la creatividad visual. Los diseñadores resuelven problemas complejos y satisfacen las necesidades del usuario; esto implica investigaciones detalladas, conceptualización estratégica y consideraciones de experiencia del usuario. El diseño abarca una variedad de campos y requiere habilidades técnicas avanzadas, además de la capacidad para comunicar mensajes complejos de manera efectiva. Por ende, el diseño va más allá de lo estético, siendo una combinación de creatividad, análisis y estrategia para crear soluciones funcionales y significativas.


  • Mito 2: "Los diseñadores se mueren de hambre, no hay futuro en esta profesión."
La creencia de que "Los diseñadores se mueren de hambre, no hay futuro en esta profesión" es un mito desacertado. En realidad, la demanda de diseñadores sigue siendo alta en un mundo cada vez más digital y visual. Los diseñadores tienen oportunidades en diversas industrias, desde medicina hasta marketing, y pueden prosperar como autónomos, empleados o emprendedores. La industria del diseño está en constante evolución, con nuevas tecnologías y especializaciones que ofrecen oportunidades de crecimiento. Además, los diseñadores somos creativos a la hora de resolver problemas, lo que significa que siempre encontraremos maneras innovadoras de triunfar en nuestra carrera.


  • Mito  3: "Cualquier persona puede ser un diseñador, no se necesita educación formal."

La creencia de que "Cualquier persona puede ser un diseñador, no se necesita educación formal" es un mito porque subestima la complejidad y la experiencia que implica la profesión del diseño. La educación formal en diseño proporciona conocimientos técnicos, teóricos y prácticos fundamentales que son esenciales para crear soluciones efectivas y significativas. Los diseñadores educados formalmente comprenden los principios del diseño, la teoría del color, la tipografía y la psicología del usuario, entre otros aspectos. Además, reciben orientación y retroalimentación de profesionales experimentados y tienen acceso a recursos especializados. Aunque la creatividad es importante, la formación formal brinda la base necesaria para traducir esa creatividad en diseños funcionales y estéticamente atractivos, lo que refuta el mito de que cualquier persona puede ser un diseñador sin educación formal.


  • Mito 4: . "El diseño es solo para las artes visuales, no para otros campos como la ciencia o la tecnología."

El diseño es una disciplina interdisciplinaria que trasciende las fronteras tradicionales. En la ciencia y la tecnología, el diseño es esencial para crear interfaces de usuario intuitivas, desarrollar productos ergonómicos y comunicar complejos conceptos científicos de manera accesible para el público en general. Los principios de diseño también se aplican en campos como la arquitectura, la medicina y el marketing, donde la estética y la funcionalidad son igualmente cruciales. La colaboración entre diseñadores y profesionales de otras disciplinas es fundamental para la innovación, lo que demuestra que el diseño no está limitado a las artes visuales, sino que tiene un papel vital en diversos campos para mejorar la experiencia y eficiencia en múltiples contextos.

  • Mito 5: "El diseño es solo para artistas talentosos."

La creencia de que "El diseño es solo para artistas talentosos" es un mito porque el diseño es más que simplemente la habilidad artística. Aunque la creatividad es importante, el diseño también implica conocimientos técnicos, comprensión de los usuarios y habilidades para resolver problemas. Los diseñadores exitosos no solo confían en el talento artístico, sino que también aplican principios de diseño, teoría del color y psicología del usuario para crear soluciones efectivas y atractivas. La educación y la práctica constante permiten a las personas desarrollar estas habilidades, lo que significa que el diseño es accesible para cualquiera dispuesto a aprender y mejorar. La dedicación y la pasión por el diseño son tan cruciales como el talento natural, lo que desmitifica la idea de que solo los artistas talentosos pueden tener éxito en el campo del diseño.


Estos mitos desacreditados sobre el diseño gráfico han demostrado ser barreras ficticias que hemos superado con dedicación y educación formal. En realidad, el diseño va más allá de los estereotipos y las limitaciones impuestas por las percepciones equivocadas. En cada rincón de la ciencia, la tecnología, la medicina y más allá, el diseño desempeña un papel vital, transformando ideas en experiencias cautivadoras y funcionales para el mundo. Gracias a esto, ahora elevo la cabeza cada vez que menciono mi carrera, por la amplitud, la diversidad, la importancia y el trabajo que conlleva toda esta disciplina. Aunque muchos jamás lo llegarán a entender o no querrán hacerlo, yo ya estoy en paz con esas miradas desacreditadas, con esos comentarios desalentadores y momentos incómodos. Estoy consciente de todo el aporte que hacemos como diseñadores en distintas áreas y, al final del día, aprendí que a la única persona a la que uno tengo que convencer de que esto es lo que realmente amo, es a mi misma.







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