En el contexto de diseñadores, a la hora de diseñar, nos enfrentamos a menudo con bloqueos creativos o soluciones a primera vista. En mi trayectoria como diseñador, llegué a experimentar y notar mucho este fenómeno. Y me di cuenta que para realmente crear, innovar y proponer diseños interesantes y sobre todo soluciones nuevas, es necesario explorar más allá de la primera idea, incluso diría más allá de la 5ta. En este artículo veremos por qué es necesario no quedarse con fundamentos basados en la experiencia o intuición, que normalmente surgen como primeras ideas y como en cambio buscar soluciones más creativas.
Resulta obvio notar que para diseñar necesitamos fundamentos, investigación y justificación. Recurrir a la primera idea, puede ser una respuesta rápida al problema, que rara vez es la más innovadora y creativa, puede que tenga justificación pero la inspiración viene de la experiencia o de soluciones muy comunes. Para solucionar esto te propongo 3 pasos para mejorar tus soluciones gráficas; Buscar inspiración, hacer bocetos y testear la solución.
La primera recomendación que te puedo dar, es que antes de diseñar te preocupes por buscar inspiración de lo que quieras transmitir, de los colores que planeas usar, de las emociones que te transmiten las cosas. Y lo mejor para esto es preparar un moodboard, que no necesariamente tiene que tener soluciones al problema, sino es mejor cuando tiene referencias de diferentes objetos, lugares y medios.
El segundo paso y más importante en mi opinión es hacer bocetos, que muchas veces las pasas por alto al creer tener una idea clara y rápida. Los bocetos nos ayudan a que esas ideas que tenemos, al pasarlas al papel no se pierdan. Además que al escribirlas o dibujarlas, puedes ayudar a que nuevos pensamientos pasen por tu mente y no te retengas en una única solución.
Por último no hay que olvidarnos que nuestro trabajo tiene que resolver una problemática. Y asegurarnos que cumpla su función es necesario para poder decir que la solución es efectiva y creativa. Te recomiendo que hagas pequeñas pruebas y estés abierto a recibir retroalimentación y si es necesario, empezar de nuevo.
En conclusión, el verdadero sabor de un buen diseño está en que sea una idea creativa, diferente, innovadora, que surge cuando nos aventuramos más allá de esa primera ocurrencia, para lograr esto te animo a buscar más allá de la primera idea, la verdadera innovación surge cuando exploras, experimentas y testeas. A menudo, las mejores ideas emergen en el cuarto o quinto intento, ¡suerte en tu próximo trabajo!
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