En un mundo en donde el 90% es visual, la fotografía y la ilustración presentan distintas formas de arte y comunicación, pero se pueden entrelazar para contar una historia en profundidad.
En el momento desde que se tiene la intención a lo que tomara una fotografía o se dibujará una ilustración, comienza a crearse magia, que nos permite crear composiciones que no hacen falta las palabras para comunicar.
Pero la pregunta es ¿Cómo puedo crear una fusión entre ambas?
Primeramente, el estilo y la estética, pueden ser de ayuda para determinar que tipo de trabajo queremos realizar, es decir, ¿Cuál es mi intención? ¿Qué quiero comunicar? ¿Hay una historia que quiera contar? Conocer estas preguntas y responderlas es esencial para saber la dirección del proyecto.
Para fusionar estos dos estilos, debemos pensar en la paleta de colores. En el momento en el que se fusionen deben tener una armonía visual. Y se debe establecer el tipo de estilo en la ilustración, tomando en cuenta el tipo de trazo para mantener una única esencia. Por lo tanto, si decides incorporar detalles o texturas, debes tener claro que reflejen esa conexión y continuidad entre ambas.
Comentarios
Publicar un comentario